Pero tranquilos, en este partido tampoco murió nadie, aunque continúo la metáfora. Y sigo con esto porque Estudiantes tras controlar bien el aire- escaso para los llaneros- en cancha de la Liga, se quedó sin oxígeno ni piernas y recibió dos goles que parecen ahogar las chances de seguir de mística copera... Digo parece, porque en La Plata, con más aire (¿y más presión?) la historia puede ser heroica.
El PT no fue original. El equipo del llano, guarda piernas y aire parando las líneas lo más lejos posible del arquero. Los mediocampistas controlan la recuperación y distribuyen en ofensiva corriendo lo menos posible: centros lo más precisos posibles de Verón, tiros de media distancia de La Brujita, recuperación y pase- asistiencia de Benítez y el 11 pincha. Los dos delanteros atentos a las habilitaciones y al achicar en la salida de los defensores rivales: Lázzaro siempre alerta y peligroso, Lugüercio más trabar y disputar que jugar. La Liga tenía la idea de apurar cada pelota dividida, corte del juego por lateral, tiro libre, etc. para descargar la batería pincha y jugar por la derecha con Jofré Guerrón, la revelación de LDU durante la misma copa. El era la descrga de Araujo, el eje de Vera y Urrutia y el compañero de ataque de Bolaños y Manso. Estos dos últimos tuvieron chances concretas para convertir jugadas peligrosas que Liga descubrió -un poco tarde por la inicial y comprensible estática de Angeleri- podía generar a espaldas de Mambrú. Cuando éste abría el surco por la derecha y Verón no llegaba para capitalizar una pelota perdida como remate al arco, Galván y/o González no se daban cuenta de que quedaba la espalda sin guarda. Así, el primer tiempo terminó mostrando un partido con varias chances, para ambos lados, con 4, 5 jugadores por lado que atacaban a las vallas rivales.
Pero el pincha gastó un tubo en ese final. Y en el complemento a medida que los ecuatorianos aceleraban, la acadé se desinflaba. Así, LDU puso a prueba desde el minuto 1 y a los 5 ya calentaba todo el banco de Sensini. Pero Boquita escamoteó los cambios hasta que Estudiantes, luego de algunos centros-tiros al arquero de Verón, no pudo con el ritmo veloz que impuso adrede Liga, que atacaba cada vez más a sus anchas.
En la segunda mitad, el conjunto local catapultó todo lo hecho hasta aquí por el Pincha, primero fue un remate fortísimo de Guerrón que abrí el marcador y luego el para algunos desaparecido Damián Mano – de pasado en Newells E independiente – encontró el balón y sentenció el 2 a 0.
Resultado que no le cayó bien al conjunto de Sensini, pero que no es definitivo. Estudiantes jugará ante su público y tranquilamente tiene con qué para eliminar a su rival de turno.
El PT no fue original. El equipo del llano, guarda piernas y aire parando las líneas lo más lejos posible del arquero. Los mediocampistas controlan la recuperación y distribuyen en ofensiva corriendo lo menos posible: centros lo más precisos posibles de Verón, tiros de media distancia de La Brujita, recuperación y pase- asistiencia de Benítez y el 11 pincha. Los dos delanteros atentos a las habilitaciones y al achicar en la salida de los defensores rivales: Lázzaro siempre alerta y peligroso, Lugüercio más trabar y disputar que jugar. La Liga tenía la idea de apurar cada pelota dividida, corte del juego por lateral, tiro libre, etc. para descargar la batería pincha y jugar por la derecha con Jofré Guerrón, la revelación de LDU durante la misma copa. El era la descrga de Araujo, el eje de Vera y Urrutia y el compañero de ataque de Bolaños y Manso. Estos dos últimos tuvieron chances concretas para convertir jugadas peligrosas que Liga descubrió -un poco tarde por la inicial y comprensible estática de Angeleri- podía generar a espaldas de Mambrú. Cuando éste abría el surco por la derecha y Verón no llegaba para capitalizar una pelota perdida como remate al arco, Galván y/o González no se daban cuenta de que quedaba la espalda sin guarda. Así, el primer tiempo terminó mostrando un partido con varias chances, para ambos lados, con 4, 5 jugadores por lado que atacaban a las vallas rivales.
Pero el pincha gastó un tubo en ese final. Y en el complemento a medida que los ecuatorianos aceleraban, la acadé se desinflaba. Así, LDU puso a prueba desde el minuto 1 y a los 5 ya calentaba todo el banco de Sensini. Pero Boquita escamoteó los cambios hasta que Estudiantes, luego de algunos centros-tiros al arquero de Verón, no pudo con el ritmo veloz que impuso adrede Liga, que atacaba cada vez más a sus anchas.
En la segunda mitad, el conjunto local catapultó todo lo hecho hasta aquí por el Pincha, primero fue un remate fortísimo de Guerrón que abrí el marcador y luego el para algunos desaparecido Damián Mano – de pasado en Newells E independiente – encontró el balón y sentenció el 2 a 0.
Resultado que no le cayó bien al conjunto de Sensini, pero que no es definitivo. Estudiantes jugará ante su público y tranquilamente tiene con qué para eliminar a su rival de turno.
Fotos: Diario Ole
Video con el resumen del partido
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